viernes, 7 de marzo de 2008

Gárgolas

Las gárgolas, esculturas de carácter grotesco, combinación de animales y humanos, fueron construidas en las catedrales del gótico comprendiendo de varios fines, además del estético, uno de ellos era representar que el mal salía de ese lugar sagrado que era la catedral, otro era para proteger a la iglesia de los demonios y por último servían como desagüe.

Gárgola viene del francés que significa el ruido de un líquido por un tubo o del latín, hacer gárgaras. Por esto muchos consideran que a menos que tenga la función de desagüe no se le puede llamar gárgola, aunque esté en una catedral y sea la escultura de un animal fantástico o monstruoso sin esta función solo se les puede llamar quimeras.

En mi opinión lo anterior estaría bien, sobretodo por el significado de la palabra, pero el problema es que desde pequeños nos enseñan que todos esos monstruos que son parte de la arquitectura gótica se les llama gárgolas y por que no podríamos llamarles de esta forma si otro de los fines es la representación, una de dos, del mal fuera de la iglesia, ó, de los guardianes que protegen la catedral de seres malignos. Además el significado de la palabra es el hacen gárgaras y estoy seguro que cuando llueve el agua también escurre por sus bocas.

Las gárgolas además de todo esto siempre se me han hecho seres fantásticos que merecen el titulo de arte pues por más grotescas que sean tienen algo especial que al verlas realmente parece que están vivas observando el exterior, como guardianes eternas de su hogar, la catedral.


sábado, 9 de febrero de 2008

El arte de la momificación

Los antiguos egipcios, como todas las culturas antiguas, se regían por un carácter religioso. Al ser una sociedad politeísta, no es de sorprender que las imágenes religiosas se encontraran desde los barcos y cocinas, hasta las tumbas y las calles.

Las pirámides, grandes construcciones con base cuadrada, fueron el lugar de descanso de los grandes gobernantes del Alto y Bajo Egipto. Las más famosas de la zona de Gizeh son Keops, Kefren y Misecerinos, las tres grandes pirámides.

Las dos principales finalidades de estas construcciones eran el ayudar al espíritu a llegar a la mansión de los dioses en los cielos, y a su vez mantener a salvo el cuerpo en la tierra. Para cumplir esta ultima misión, las pirámides contaban con distintos “candados” como lo eran pasillos cerrados, inscripciones jeroglíficas de maldiciones, y en casos varios, trampas mecanizadas.

Pero, ¿cómo una construcción por si sola podía mantener a salvo un cuerpo? Los seres vivos al morir nos descomponemos, es el ciclo vital de todo organismo. Es por eso que los egipcios crearon una forma de hacer más lento el proceso de putrefacción, hasta casi el punto de evitarlo. La momificación es el proceso por el cual esta civilización mantenía el cuerpo intacto para poder vivir en el más allá.

Este proceso no era para todos, era para quien pudiera costearlo, y así mismo no cualquiera podía llevarlo a cabo, solo los embalsamadores eran quienes llevaban a cabo el proceso. Actualmente se sigue considerando un arte este proceso, que aunque artesanal, sigue siendo una verdadera hazaña el como una de las primeras civilizaciones logro un avance tecnológico y científico can grande en materia de anatomía y biología.

El proceso es largo, pero cumple su cometido. Una vez que el cuerpo llegaba con el embalsamador, éste retiraba todos los órganos internos con una precisión impecable para no dañar nada, lo más interesante es la extracción del cerebro, ya que no se habría el cráneo para

ello, si no que lo retiraban por la nariz haciendo uso de pinzas al rojo vivo.

Una vez extraído todo órgano interno, éstos se
colocaban en los Vasos Canopes, los cuales eran vasos de cerámica o piedra que poseían
jeroglíficos y sus tapas tenían la forma de los dioses relacionados a la muerte y a la vida como lo son Ra, Anubis y Bastet, por mencionar algunos.

Para secar el cuerpo, se llenaba de una mezcla de arena, hierba seca y trapos. Después de eso se espolvoreaba con natrón (nombre común para el carbonato sódico, que es una sal blanca y translúcida) y se dejaba en reposo por 40 días.

Pasado este tiempo, se extraía todo lo que se le introdujo al cuerpo, ya que el cuerpo se encontraba seco, y se suavizaba la piel con ungüentos y aceites para finalizar con la colocación de las vendas de lino.

Todo este proceso, que suena simple, en verdad era motivo de admiración y respeto en la antigüedad. Nosotros lo consideramos un arte porque es parte de una cultura muy enigmática y sobresaliente. No es solo un proceso, es una técnica que por años se ha estudiado y que en su tiempo fue perfeccionada. Por si fuera poco, no todos podían realizar este ritual, convirtiéndolo en algo más que un oficio.

Una cámara mortuoria de una pirámide, es una obra de arte, desde los murales, hasta la joyería, pasando por el sarcófago, y claro está, la momia; anfitriona de la última morada.

sábado, 26 de enero de 2008

Los comienzos del arte



El arte ha existido en todo momento de la historia, dando algo que contar a quien lo encuentre y aprecie. Desde tiempos lejanos, los humanos se han expresado modificando su ambiente para dejar rastro de lo que alguna vez los rodeó y de lo que fue vivir como ellos.

El arte prehistórico, basado en expresiones plásticas como la pintura y la escultura en su etapa denominada paleolítica (Edad de la piedra vieja), nos cuenta el modo de vida de nuestros ancestros. Puntas de lanza, cuchillos, incluso hachas, son algunas de las herramientas que pueden encontrarse pertenecientes a éste período. Aunque muy arcaicas, estas herramientas permitieron la supervivencia de los primeros hombres, quienes se encontraban en constante peligro.

Tenemos que recordar que la especie humana siempre ha tenido un fuerte arraigo hacia lo espiritual, y los hombres prehistóricos no son la excepción. ¿Porqué pintar en cuevas escenas de caza? A primera instancia nos atreveríamos a decir que querían plasmar su travesía para poder conseguir vestido y comida. Porque, para ser sinceros, cazar un mastodonte, un mamut o incluso a unos cuantos miembros de una manada de caribúes debe ser un verdadero reto. ¿No sería prudente un poco de ayuda mística para esta labor?

Con el tiempo, historiadores, investigadores, e incluso artistas llegaron a una conclusión que una muy posible razón para pintar animales dentro de las cuevas tenia una función religiosa. Se cree que los antiguos hacían un ritual previo a la casería, y parte de éste consistía en representar al animal en sus lugares de descanso, con lo que atraparían su espíritu y hacer la cacería más benéfica. Esta justificación parece ser una muy acertada, ya que en la pintura, sin importar el tiempo, el artista siempre ha buscado dejar algo dentro de ella. Se puede dejar una parte del autor o capturar la esencia de lo que se plasma en blanco lienzo, que en este caso sería un rugoso y nada uniforme lienzo.

Dentro del mismo ramo de la pintura, se han podido distinguir bastantes tipos de representaciones de la figura humana. La figura álpera es el estilo más apegado a lo real, mientras que la filiforme es la representación más simple. Una formas muy interesante dentro las pinturas es la paquípoda, donde la figura dan la sensación de tener patas de elefante. ¿Habría alguna razón estética para este tipo de figuras?, ¿habrían existido hombres con esa característica o bien pudo ser el indicio de alguna prenda de vestir? Me temo que solo podremos especular al respecto.

Las sociedades de la prehistoria eran de carácter nómada. Se vivía del trabajo duro por las largas caminatas en búsqueda de alimento, cobijo y por defenderse de animales salvajes o incluso de otras tribus. Al tratarse de un aspecto de capacidades físicas, el hombre era considerado mucho más importante que la mujer, es por ello que muchas representaciones fálicas han sido encontradas dentro de este periodo.

Con el tiempo, el modo de vida, la caza, las herramientas e incluso la vestimenta y el cerebro fueron cambiando. El modo machista de pensar cambió cuando se dieron cuenta que la mujer era la clave para la reproducción y esto fue cuando las tribus se hicieron sedentarias en la ahora etapa del Neolítico. Es aquí donde se comienza a ver un mejor trabajo en la talla de la piedra y del hueso. Pequeñas representaciones de animales con detalles impactantes y la representación femenina asociada con la abundancia en las famosísimas venus, como las de Willendorf y Laussel.

Estas figuras femeninas cuentan con una peculiaridad. Se ven gordas. Lo cual nos hace pensar que esa era la belleza de la época. Lo cual no es de sorprenderse, ya que el estándar de belleza que nos rodea en la actualidad es relativamente moderno.

Esto es a grandes rasgos lo que ocurre con el arte en la prehistoria. Seguramente los autores desconocidos de estas piezas no tenían la menor idea de que haciendo sus herramientas, sus rituales o incluso simplemente divirtiéndose estarían contribuyendo a la base de una disciplina internacional y muy interesante que engloba el estudio, la documentación y el análisis; la Historia del Arte.